Siempre me han gustado las tizas y las pizarras. En el cole me encantaba escribir en la pizarra… Cuando me sentaba en el pupitre me gustaba mirar mi letra, para ver el resultado. Las pizarras siempre me han parecido creativas, una forma de pintar y crear algo desde lo negro, o lo que es lo mismo, la nada. Las tizas permiten hacer un trazo fino o muy grueso, crear sombras, relieves, darle algún toque de color… El único defecto que le veo: el polvillo blanco que ensucia, y no se si será muy práctico en una casa.
De todos modos, os he recopilado algunas imágenes (todas vía Pinterest) de espacios, muebles y objetos pintados con este producto. En Holamamá shop tienen pintura de pizarra de varios colores, pero seguro que en cualquier tienda de manualidades podéis encontrar este producto también.
Por ejemplo, pintura de pizarra aplicada en una pared de la casa.
O en la cocina.
O en la habitación de los peques, queda genial.
En una mesa para los niños.
O en una bandeja de porcelana para presentar un buffet de quesos.
O unos posavasos y salvamantel.
De colores también queda muy chula, además de poder quedar superficies con distintas formas (círculos, cuadrados, triángulos…).
¿Qué os parece la pintura de pizarra? ¿Os gusta? ¿La habéis utilizado?